Cuando pensamos en isla paradisiacas localizadas en el océano indico nuestra mente viaja a lugares tan exóticos como Maldivas, Seychelles, Mauricio, Bali, Java o Sri Lanka, pero hay una isla tan grande como desconocida que agrupa lo mejor de todas las maravillosas islas mencionadas y se llama Madagascar.
¿Dónde está Madagascar?
Está situada en el Océano Indico, frente a la costa sureste del continente africano, al este de Mozambique. Es la isla más grande de África y la cuarta más grande del mundo después de Groenlandia Nueva Guinea y Borneo
¿Cuándo ir a Madagascar?
Se encuentra en el hemisferio sur, sus estaciones son inversas a las de Europa, así nuestro verano es su invierno. Su clima es subtropical por lo que sus temperaturas no llegan a ser extremas ni en verano ni en invierno.
Tan solo hay una época no recomendable para visitar Madagascar, es durante la época de lluvias de noviembre a abril cuando se dan a veces potentes ciclones, es mejor evitar viajar en estos meses.
¿Por qué te gustará Madagascar?
Muchos viajeros preguntan ¿me gustará? Y solo existe una respuesta, “tal vez”, Si eres una persona flexible, amante de la naturaleza, de la diversidad cultural, con ganas de conocer una gente excepcionalmente cordial con sorprendentes tradiciones el país te encantará.
Si por el contrario eres una persona rigurosa, amante del orden, de la puntualidad extrema, si no te gusta caminar o conducir por carreteras tortuosas, eres intolerante con costumbres y formas de ser muy distintas a las convencionalmente aceptadas, entonces mejor que elijas otro destino, decididamente Madagascar no es para ti.
Madagascar, naturaleza viva
Para aquellos que están dispuestos a descubrir una isla llena de naturaleza y una cultura única en el mundo esto es tan solo una pequeña parte de lo que les espera.
Madagascar goza de unos paisajes de ensueño con una fauna y flora diseminada en 19 parques nacionales, 24 reservas especiales y 5 reservas naturales, hábitat de 25.000 especies de animales, el 58% de las especies de animales y plantas del mundo, de los cuales más del 80% son endémicas, algunos no pueden ser vistos en ningún otro lugar del mundo.
Su árbol más característico por la forma de sus ramas es el bello y misterioso baobab que vive una media de ochocientos años.
La vida animal la protagonizan los lémures, primates también endémicos de la isla, hasta 100 son las especies de primates lémures que se pueden encontrar, su nombre procede de los fantasmas o espíritus de la mitología por sus chillidos, ojos tan brillantes y penetrantes y sus hábitos nocturnos, ellos son los dueños y señores y la animación constante de la isla.
Madagascar no es solo playa y selva, su montaña más alta es Maromokotro con 2.876 metros. Un reto motivador para los amantes del trekking y la aventura.
Y en cuanto a paisaje cuenta, además de selva y playas vírgenes con los Tsingys, formaciones rocosas con formas de torres surrealistas.
Madagascar, cultura y gastronomía únicas
En Madagascar se mezclan las culturas africanas y asiáticas dando origen a los malgaches, gente maravillosa, amable, pacífica, honesta, alegre y divertida con tradiciones, tan sorprendentes como la Famadihana, una exótica ceremonia que rinde, de una forma muy particular, culto al retorno de los muertos.
En cuestión de gastronomía es un país muy ecléctico combinando lo mejor de Asia, África y Europa puesto que la isla fue colonia francesa. Todo gira en torno al arroz con elaboraciones de platos sorprendentes. El termino tan habitual que nosotros utilizamos de “invitar a cenar” ellos lo traducen como “invitar a comer arroz”
Y si Madagascar les ha cautivado les recomiendo terminar su estancia en uno de estos dos hoteles, el elegante Anjajavy-L Hotel, miembro del exclusivo club “Relais & Chateaux”, o el Tsarabanjina, el resort ideal para vivir una lujosa experiencia al más puro estilo “Robinson Crusoe”. Lugares mágicos donde la felicidad se siente tan cercana que uno no querría irse nunca.
Por mi experiencia te recomiendo que no dejes de visitar esta maravilla ¿te animas?