Habitualmente hablo de viajes, de hoteles, de monumentos y de lugares únicos en el mundo.
Hoy también voy a hablar de lugares únicos, de algunos de los restaurantes más bonitos del mundo, que en ocasiones también unen a su belleza una exquisita gastronomía y estar situados en enclaves muy particulares.
Esta lista que, insisto, no trata de los mejores restaurantes del mundo sino de los más bellos, está inspirada en la selección que hace mi admirado Tom Marchant, uno de los mejores diseñadores de viajes del mundo, cofundador de la agencia de viajes de lujo Black Tomato , que ofrece experiencias de lujo en todo el mundo a través de itinerarios inspiradores a destinos exóticos y remotos.
Hay pocas cosas en esta vida tan memorables como una comida íntima y acogedora y la siguiente lista representa la quinta esencia de esos momentos, restaurantes que saben crear, además de exquisitos platos, una atmósfera mágica.
Nueva York: The Gallery Restaurant en el hotel The Carlyle
Fue diseñado por el prestigioso decorador italiano Renzo Mongiardino quien se inspiró en el Palacio Topkapi de Estambul. Un lugar lleno de vida, rebosante de kilims bordados y detalles de diseño ecléctico con un estilo muy característico y teatral.
A destacar la hora del té The Gallery con vajilla exclusiva para tomar sus famosos cana
pés de foie gras y sándwiches con crema Devonshire, en un entorno con poca luz, y acomodados en cómodos sillones de terciopelo.
Santorini: Lycabettus
Uno de los restauramntes con mejores vistas del mundo se encuentra en la isla griega de Santorini, es el Lycabettus y está sobre un acantilado.
En él se pueden apreciar los atardeceres más bellos del m
undo a la vez que se degusta de una exquisita gastronomía griega.
Un festín para el paladar y para los ojos en un ambiente romántico y acogedor en el que podría ser el fin del mundo.
La mejor y más solicitada es la Sommelier’s Table que hay que reservar con muchos meses de antelación.
El restaurante dispone además de un hotel boutique, una combinación perfecta para los amantes de la buena cocina y de los hoteles únicos en un lugar del mundo privilegiado.
Londres: Clos Maggiore
En un espacio único rodeado de preciosas flores, el Clos Maggiore en el corazón del Covent Garden londinense fusiona la influencia de dos regiones con gran personalidad, La Provenza francesa y la Toscana italiana. Su decoración crea un ambiente íntimo, romántico, cálido, especialmente en primavera y verano, pero también en invierno, gracias a la luz de las velas y su acogedora chimenea.
El menú diseñado por el chef Marcellin Marc, prepara platos de la Provenza con un toque contemporáneo con productos locales de temporada y una bodega con más de 2000 referencias
Marrakech: Villa des Orangers
El ryad más exclusivo de Marrakech, miembro de la prestigiosa asociación hotelera Ralais et Chateaux, cuenta, además de unas magníficas habitaciones, con uno de los mejores restaurantes de Marruecos.
De estilo colonial francés de club en un ambiente lujoso a la vez que íntimo y discreto decorado a base de cuero, terciopelo y madera, con una gran chimenea en el salón principal
La comida tiene mucha influencia francesa. Foie gras con crujiente de membrillo, cigalas noisette de cordero con macarrones de berenjena y pomelo son algunas de las especialidades que ofrece este carismático restaurante alrededor de la piscina bajo los olivos.
Ravello: Il flauto di pan
Es el restaurante con estrella Michelin del exclusivo hotel Villa Cimbrone.
Si al encanto y belleza de la Costa Amalfitana le unimos las asombrosas vistas desde la terraza del restaurante, un servicio exquisito y una comida honesta y fiel a la historia culinaria de la región nos encontramos ante una experiencia gastronómica única y memorable.
Un restaurante en el que, muy posiblemente, Patricia Highsmith se inspiró para definir la personalidad de Mr. Ripley.
nombre de sus (lo adivinaste …) vistas panorámicas, este acogedor restaurante encarna el espíritu puro de la cena estilo chalet. Decorado con alfombras, chimeneas, mantas de piel y paredes con paneles de madera, este restaurante encarna todas las cosas cómodas y acogedoras. Para aquellos que quieran lucirse con estilo, hay un funicular que lo transportará a pocos centímetros de su mesa. Espere hacer eslalon a través de la tarifa adecuada de la montaña Savoyarde, también conocida como toneladas de fondue decadente, y regresar a casa mucho más pesado y más feliz que cuando llegó.
París: Chez Julien
Situado en el carismático barrio del Marais, el Chez Julien es el restaurante ideal que viene a nuestra mente cuando pensamos en el típico restaurante parisino
Un monumento histórico catalogado como una obra maestra de la Belle Époque que es una de las fachadas más fotografiadas de la ciudad con sus enredaderas, marquesinas y encantadoras mesas de bistró.
El restaurante ideal para poetas, bohemios y románticos.
Estocolmo: Fem Sma Hus
El Fem Sma Hus es un restaurante escondido entre cinco pequeñas casas suecas tradicionales de 1694, justo al lado de St. Göran and the Dragon, en el corazón del casco antiguo de Estocolmo.
En él se puede degustar lo mejor de la cocina sueca con un toque francés.
El restaurante está ubicado en nueve bóvedas en el sótano que se encuentran debajo de cinco casas diferentes. Los salones están distribuidos entre los acogedores arcos iluminados por velas lo que le da al restaurante una energía verdaderamente íntima, hogareña y romántica.
Maldivas: Soneva Fushi
Un concepto de cocina innovadora a base de productos orgánicos en uno de los hoteles más lujosos situado en una isla privada de las Maldivas.
El menú que consta de cinco platos se basa productos locales de vivos colores en los que predominan el característico sabor umami.
Una auténtica experiencia que comienza con un recorrido por el exótico jardín, donde puedes elegir, probar y oler los ingredientes de la comida que vas a degustar en el mismo huerto jardín donde se cultivan muchos de los ingredientes.
Si te gusta disfrutar de la gastronomía en tus viaje te invito a leer mis post relacionados